Crisis por precios
El alza en los precios de fertilizantes sintéticos -como la urea- ha provocado alarma entre los agricultores y gobiernos del mundo. Temen que una reducción en el uso de estos fertilizantes debido a los altos costos provoque una crisis alimentaria. Pero, ¿incentivar la aplicación de fertilizantes sintéticos como la urea es una solución efectiva para avanzar hacia una agricultura sustentable. ¿Hay mejores alternativas?
Es cierto que la úrea y otros fertilizantes sintéticos permiten un aumento en el rendimiento de los cultivos. Pero también contaminan los suelos y el agua y contribuyen al calentamiento global. El problema es su uso excesivo, pues las plantas absorben sólo una parte del fertilizante aplicado. La parte que no es asimilada por los cultivos se filtra en los suelos y en los cuerpos de agua, o se convierte en óxido nitroso que se libera a la atmósfera, contribuyendo al calentamiento global.[1] También aumenta el riesgo de contaminación del agua por nitratos y afecta la capa de ozono[2].
Los fertilizantes nitrogenados en el Perú
El portal “Our World in Data[3]” ha sistematizado información sobre la utilización de fertilizantes nitrogenados a nivel global, y según podemos observar en el gráfico 1, el Perú es uno de los países que está aplicando nitrógeno en exceso.

El Reporte Anual de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (RAGEI) del sector Agricultura en el Perú[4] para el año 2016 estima que las importaciones de urea entre 2005 y 2017 crecieron desde 248,000 a 414,000 toneladas anuales[5]. La urea es el fertilizante con mayor concentración de nitrógeno (47%) y según el RAGEI, se calcula que anualmente se aplican cerca de 165 millones de kilogramos de nitrógeno a los suelos del país. (Cuadro 2)
Cuadro 1 Cantidad anual de Importaciones de Principales Fertilizantes Nitrogenados, 2016

Cuadro 2. Contenido de N en kg en los fertilizantes sintéticos

Concentración de Nitrógeno por tipo de fertilizante

Alternativas
Estudios recientes han demostrado que sí es posible aumentar el rendimiento de los cultivos y simultáneamente reducir el uso de fertilizantes nitrogenados, combinando técnicas de gestión del suelo y del agua como la siembra y cosecha del agua, el uso de fertilizantes en microdosis, la agrosilvicultura, métodos agrícolas sin quema, y otros enfoques agroecológicos. [6]
Los fertilizantes orgánicos son presentados como una alternativa menos contaminante que los sintéticos. Sin embargo, esto depende del tipo de fertilizante utilizado. Los “abonos verdes” -cultivos como las leguminosas que añaden nitrógeno al suelo- logran reducir la cantidad de otros fertilizantes y mejorar la captura de carbono en el suelo.
Soluciones adoptadas internacionalmente
La Unión Europea ha establecido objetivos ambiciosos en relación al uso de fertilizantes. Con su política “De la Granja al Tenedor” espera reducir el uso de fertilizantes en al menos un 20 % para 2030, incluido el estiércol animal. Muchos otros países han incorporado medidas relacionadas con los fertilizantes en sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC) para enfrentar el cambio climático. Por ejemplo, en Chile se contempla la asistencia técnica para el uso eficiente de fertilizantes nitrogenados; En Colombia se han establecido medidas de manejo eficiente de fertilizantes nitrogenados en cultivos como arroz, panela y otros, con sustitución parcial y gradual por fertilizantes orgánicos, cuando sea factible. En El Salvador se propone que la fertilización nitrogenada se realice con base en análisis de suelos. En las NDC peruanas se propone incrementar la absorción de fertilizantes en el cultivo de arroz a través del uso de la tecnología de riego por secas intermitentes e implementar buenas prácticas de fertilización de los suelos en zonas vulnerables a peligros asociados al cambio climático.
Sin embargo, optimizar el uso de fertilizantes también requerirá cambiar las políticas y regulaciones que en la actualidad alientan a los agricultores a aplicar más fertilizantes de lo necesario. Es una acción que debería ser considerada como prioritaria en la Segunda Reforma Agraria que el MIDAGRI se ha comprometido a llevar adelante.
[1] Ross, K. y otros (2019) “Mejorar las NDC: oportunidades en el sector de la agricultura”. Documento de trabajo. WRI. https://bit.ly/3ib5N4j
[2] MIDAGRI (2020). “Reporte Anual de Gases de Efecto Invernadero del sector Agricultura del año 2016 Categorías: Ganado y Fuentes agregadas y emisiones no-CO2 en otras tierras” https://bit.ly/3IjA5fI
[3] INEI (2019). Compendio Estadístico Perú 2018 https://bit.ly/3ieCWMx .
[4] Wise, Timothy (2021) “Magical thinking on fertilizer and climate change” IATP. https://bit.ly/3CK7bUQ
[5] CINMYT (2021) “La capa de ozono y los fertilizantes nitrogenados”. https://bit.ly/3Jn8cVE
[6] Ritchie,Hannah; Roser, Max (s.f.). “Fertilizers Data Explorer”. https://bit.ly/3upf8vh