Constantino Vilcañaupa, perdió el 50% de su producción de cebada, haba, alverjas y olluco, como consecuencia de la helada y la granizada.
El agricultor, no es el único que vivió esta lamentable situación.
En la comunidad campesina de Conayca, ubicada a más de 3,500 metros de altura, los hombres y mujeres del campo que se dedican a la agricultura de subsistencia, y que todos los años enfrentan las bajas temperaturas que deterioran las plantas, también perdieron sus cultivos.
“Invertimos el dinero que nos prestó la caja rural en la campaña agrícola, y si la cosecha es baja no se puede recuperar la inversión, entonces nos descapitalizamos y empobrecemos más”, remarcó el agricultor.
Se advierte que, en esta situación de pandemia, las semillas que solían guardar las familias campesinas las van a utilizar para su consumo, es por eso que Constantino, solicito a las autoridades locales y regionales de Huancavelica, la entrega de este insumo.
No consumimos alimentos procesados
Ante el incremento del precio del pollo, aceite, lácteos y cereales, el agricultor Constantino Vilcañaupa, señala que en el campo se incrementó el consumo de alimentos saludables.
Tenemos nuestro horticuys, (alternativa tecnológica para la crianza de cuyes y producción de hortalizas simultáneamente bajo techo) donde producimos diferentes vegetales frescos y orgánicos, y también criamos cuyes, estos componen nuestra alimentación sana” indicó.
Los productores familiares de Conayca, provincia Huancavelica, región Huancavelica, practican la agricultura ecológica.
“Utilizamos solamente abono de nuestro guano de corral, nada más, de nuestros cuyes, de nuestras gallinitas. Antes estábamos confundidos, equivocados, utilizábamos fertilizantes, y otros químicos, que tienen precios altos, y sacábamos buena cosecha, pero afectaba nuestra salud” finalizó Constantino.